Vivimos en un mundo que nos ha anclado la idea de éxito tan equivocada, como la búsqueda inagotable y eterna de posesiones. Queremos tener más reconocimientos, más dinero, más objetos … pase por ahí. Por el 2013 tuve la fortuna de recibir una vivienda propia, pasé de vivir en la casa familiar a vivir con mi hija en un espacio grande para las dos (56 mt), que veníamos de vivir en un espacio de algo menos de la mitad. Al llegar a la casa que sería nuestro nuevo hogar, nos encontramos con un palacio de tres alcobas, dos baños, una zona social, zona de ropas, la cocina... Poco teníamos así que me obcequé con conseguir diversos artículos que me permitieran llenar los espacios vacíos: nuevas camas, un mega escritorio para estudiar, un comedor, una sofá viejo que no me gustaba pero tapaba huecos ... además quise poseer todas aquellas cosas que figuraban dentro de la lista de nuestros deseos: artilugios para hacer scrapbook, libros, juguetes, ropa…Al momento de la llegada de ...
El momento es Hoy, la vida es Ahora